El sistema de tributación por módulos ha sido durante años una opción atractiva para muchos autónomos en España. Sin embargo, en los últimos tiempos, ha estado en el punto de mira de expertos y legisladores, que consideran que este régimen está obsoleto y favorece el fraude fiscal. A pesar de ello, sigue siendo una alternativa legal y vigente para determinados profesionales y sectores.
Para comprender mejor el debate en torno a su posible desaparición, es fundamental entender cómo funciona este sistema y qué implicaciones tiene para los trabajadores por cuenta propia. Por eso, en este artículo, vamos a explorar en detalle qué es el régimen de estimación objetiva (módulos), quiénes pueden acogerse a él y todos los pormenores que le acompañan. ¡Vamos allá!
¿Qué es régimen de autónomo por módulos?
El régimen de estimación objetiva, más conocido como sistema de módulos, es una forma simplificada de tributación al que pueden acogerse los autónomos de manera voluntaria. En lugar de calcular impuestos sobre los ingresos y gastos reales (estimación objetiva), Hacienda establece unos parámetros fijos para determinar cuánto debe pagar un autónomo en concepto de IRPF e IVA. Veamos algunos de ellos:
- El tamaño del local.
- El consumo eléctrico.
- El número de empleados.
- La distancia recorrida (en transporte).
- La capacidad del negocio (en hostelería y otros sectores).
Este sistema busca agilizar la contabilidad y la liquidación de impuestos, y ha sido especialmente útil para los autónomos españoles durante las últimas 3 décadas. Sin embargo, en los últimos años está siendo objeto de debate, ya que algunos expertos consideran que facilita el fraude fiscal y no refleja la realidad económica de muchos negocios.
¿Qué autónomos y actividades pueden facturar por módulos?
No todos los autónomos pueden acogerse al régimen de estimación objetiva. Para poder tributar por módulos, deben cumplirse una serie de requisitos establecidos por Hacienda:
- Ejercer una actividad incluida en la lista oficial: Solo ciertos sectores pueden acogerse a este sistema, como la hostelería, el comercio minorista, la agricultura, ganadería o pesca, o el transporte. Como es una lista larga y muy específica en algunos casos, te invitamos a consultar en el BOE todas las actividades que pueden acogerse al sistema de tributación por módulos.
- No superar los límites de facturación: Existen topes de ingresos y de facturación a empresas que restringen el acceso a este régimen. Los veremos en el apartado que viene a continuación.
- No haber renunciado previamente al sistema de módulos en favor de la estimación directa.
- No superar el límite de compras: No se pueden haber realizado compras superiores a 250.000 euros anuales, sin contar el IVA ni las compras de inmovilizado (mobiliario, maquinaria, equipos informáticos, etc.).
- Realizar la actividad dentro del ámbito del IRPF: La actividad no puede desarrollarse fuera de España, ni de manera parcial ni total.
- No estar excluido del régimen simplificado de IVA o del IGIC (el IVA canario).
- No combinar actividades en estimación objetiva y directa: Si el autónomo ya tributa en estimación directa para otra actividad, no podrá acogerse a los módulos.
En cualquier caso, y especialmente en los últimos años donde se prevén cambios, es importante revisar cada año las condiciones, ya que los límites y actividades permitidas pueden sufrir modificaciones.
Límites de facturación por módulos
Para poder acogerse al régimen de estimación objetiva, hemos dicho que los autónomos deben respetar los límites de facturación establecidos por Hacienda. Estos límites se aplican tanto a los ingresos totales como a la facturación realizada a otras empresas. Veamos cuáles son
- Límite de ingresos anuales: No se pueden superar los 250.000 euros en ventas totales.
- Facturación a otras empresas: Si el autónomo factura a empresas o profesionales, el límite máximo es de 125.000 euros anuales.
- Compras de bienes y servicios: No deben superar los 250.000 euros anuales, excluyendo el IVA.
Si se superan estos límites, el autónomo estará obligado a tributar en el régimen de estimación directa en el siguiente ejercicio fiscal.
Cálculo del rendimiento neto por módulos en estimación objetiva
El rendimiento neto es la base sobre la que se calculan los impuestos en el régimen de módulos. A diferencia del régimen de estimación directa, donde se restan los gastos de los ingresos reales, en estimación objetiva se utilizan coeficientes y parámetros establecidos por Hacienda. Aquí tienes el modelo de la Agencia Tributaria para el cálculo del rendimiento neto por estimación objetiva.
En este ejemplo, te mostramos cuál sería el rendimiento objetivo de una peluquería de 100m2 que consume 300€ al mes, con dos empleados y que recorre 100 kms al mes para servicios a domicilio puntuales.
Para calcularlo, se haría de la siguiente manera:
- Superficie del local: 100 m² × 12,50 €/m² = 1.250 €
- Consumo eléctrico: 300 €/mes × 0,60 €/€ = 180 €
- Número de trabajadores: 2 × 900 €/trabajador = 1.800 €
- Kilometraje recorrido: 100 km × 0,40 €/km = 40 €
Rendimiento neto: 1.250 € + 180 € + 1.800 € + 40 € = 3.270 €
En 2025, al rendimiento neto anual se le aplica una reducción general del 5% (25% para afectados por la DANA en la Comunidad Valenciana)
- Reducción general del 5%: 3.270 € × 0,95 = 3.106,50 €
3.106,50 € es el importe sobre el cual se aplicarán los impuestos correspondientes en el régimen de módulos en 2025. Insistimos en que es importante revisar los coeficientes cada año, ya que pueden variar según la normativa vigente.
¿Cuánto se paga de IVA en el sistema por módulos?
En el régimen de módulos, el IVA se paga en una cuota fija trimestral, declarada a través del modelo 303. Durante los tres primeros trimestres, se aplica un porcentaje sobre la cuota devengada de las operaciones corrientes, es decir, el IVA de los ingresos. Este porcentaje depende de la actividad y está establecido en la orden ministerial correspondiente, que se puede consultar en la página de la Agencia Tributaria. Puedes consultarlo en el apartado del cálculo del IVA en los módulos.
El cuarto trimestre funciona de forma diferente. Se debe calcular la cuota devengada de las operaciones corrientes y restarle la cuota soportada (el IVA de las compras). Al resultado se le aplican unos índices correctores, que dependen de la actividad y de circunstancias específicas, como el inicio de actividad o el tamaño del negocio.
Además, en la declaración trimestral del IVA (modelo 303), los autónomos pueden aplicar una reducción del 1% en la cuota fija establecida si cumplen ciertos requisitos de facturación máxima, tamaño del negocio o máximo de compras.
El modelo 303 se presenta:
- Primer, segundo y tercer trimestre: del 1 al 20 de abril, julio y octubre.
- Cuarto trimestre: durante todo el mes de enero del año siguiente., lo que significa que los autónomos pagan una cuota fija trimestral basada en su actividad y volumen de negocio.
¿Cuánto se paga de IRPF en el sistema por módulos?
El IRPF en módulos se basa en el rendimiento neto calculado según los parámetros de la actividad. Una vez determinado este importe, se aplica el tipo impositivo correspondiente.
Los autónomos en módulos deben presentar trimestralmente el modelo 131, donde adelantan el pago del IRPF mediante pagos fraccionados del 4% sobre el rendimiento neto anual estimado. Si tienes sólo una persona asalariada, será del 3 %; si no tienes ningún asalariado, será del 2 %. Para actividades agrícolas, ganaderas y forestales, este porcentaje se reduce también al 2%.
A final de año, en la declaración de la renta, se ajusta lo que se ha pagado en los trimestres y se regulariza en función de la situación fiscal del autónomo. Si ha pagado de más, se le devuelve, y si ha pagado de menos, deberá abonar la diferencia.
Emitir facturas siendo autónomo por módulos
Los autónomos en régimen de módulos no están obligados a emitir facturas en la mayoría de los casos, ya que muchas de sus operaciones van dirigidas a clientes particulares. Sin embargo, existen excepciones en las que sí es obligatorio hacerlo:
- Cuando el cliente es otra empresa o profesional y necesita la factura para su contabilidad.
- Cuando el cliente sea la Administración Pública.
- Cuando el cliente lo solicita expresamente.
- En la venta de bienes que requieran instalación.
- En las operaciones de exportación o entregas intracomunitarias de bienes.
¿Cómo se debe emitir la factura?
Si un autónomo en módulos debe emitir una factura, debe incluir los siguientes datos:
- Datos fiscales del autónomo (nombre completo, NIF y dirección).
- Datos del cliente (nombre completo, NIF/CIF y dirección si es empresa o profesional).
- Número de factura y fecha de emisión.
- Descripción de los bienes o servicios prestados.
- Base imponible (importe sin IVA).
- IVA correspondiente, si aplica (en algunos casos, los autónomos en módulos no repercuten IVA si están en régimen especial).
- Total a pagar.
Es importante conservar las facturas emitidas y recibidas durante cuatro años, ya que Hacienda puede requerirlas en una inspección fiscal.
Los autónomos en módulos también deben presentar el modelo 347 si han realizado operaciones con un mismo cliente o proveedor que superen los 3.005,06 € anuales.
¿Qué gastos son deducibles en estimación objetiva?
En el régimen de módulos, los autónomos no pueden deducir los gastos de manera individual como en la estimación directa. En su lugar, Hacienda establece un rendimiento neto basado en parámetros fijos. Sin embargo, existen algunas deducciones y reducciones que se pueden aplicar:
Deducciones generales
- La reducción general del 5% sobre el rendimiento neto calculado de la que ya hablamos anteriormente..
- Deducción de cuotas soportadas de IVA, aplicable en la liquidación del cuarto trimestre.
- Reducciones específicas para actividades agrícolas, ganaderas y forestales (Consultar en la Agencia Tributaria).
Gastos deducibles en casos específicos
A pesar de que el sistema de módulos no permite deducir gastos como en la estimación directa, algunos gastos sí pueden considerarse:
- Cuotas de la Seguridad Social del autónomo.
- Gastos financieros relacionados con la actividad.
- Amortización de inmovilizado en caso de que se cambie al régimen de estimación directa.
- Gastos de suministros si están incluidos en la base de cálculo de módulos.
Es fundamental revisar anualmente la normativa vigente, ya que las reducciones y deducciones pueden variar en función de las actualizaciones de Hacienda.
¿Cuándo es preferible tributar por módulos y cuándo por estimación directa?
Los expertos coinciden en que la tributación por módulos es más sencilla que la estimación directa. Aunque pueda parecer lo contrario, debido a los cálculos previos para determinar el rendimiento, la clave está en que el pago de impuestos es fijo y predecible.
En el régimen de módulos, no es necesario calcular continuamente los ingresos y gastos reales, como ocurre en la estimación directa. En su lugar, se aplica una cuota establecida según la actividad, que no depende del beneficio real del negocio.
¿Cuándo es preferible tributar por módulos?
- Si buscas simplicidad en la gestión contable y fiscal.
- Si tu negocio tiene pocos gastos deducibles, lo que hace que la estimación directa no sea ventajosa.
- Si tu beneficio real es mayor que el estimado, ya que pagarás menos impuestos en proporción.
- Si cumples los límites de facturación y tu actividad está incluida en el régimen.
¿Cuándo es preferible tributar por estimación directa?
- Si tienes muchos gastos deducibles, como alquiler, suministros, personal o material.
- Si tus ingresos varían mucho a lo largo del año y prefieres pagar en función de lo que realmente ganas.
- Si prevés que tu beneficio real será menor que el estimado en módulos, para evitar pagar impuestos de más.
- Si superas los límites de facturación establecidos para módulos.
Si tienes dudas sobre qué régimen elegir, lo mejor es consultar con un asesor fiscal que pueda analizar tu caso y recomendarte la mejor opción según tu situación. En Ofidem, podemos ayudarte a estudiar tu caso y hacer las gestiones por ti. ¡Contacta con nosotros!
¿Por qué el sistema de tributación por módulos está en entredicho?
El sistema de módulos ha sido criticado durante años y está en el punto de mira tanto de economistas como de la Administración tributaria. Su principal problema radica en que la tributación se basa en parámetros fijos y no en los ingresos reales del negocio. Esto ha generado situaciones de desigualdad fiscal y ha permitido que algunos contribuyentes puedan pagar menos impuestos de los que realmente les corresponderían. Al no existir un control directo sobre los ingresos y gastos efectivos, el sistema deja margen para que algunos autónomos declaren menos ingresos de los que realmente perciben, lo que puede derivar en fraude fiscal.
También hay que considerar que este régimen se diseñó en un contexto económico diferente al actual, y su funcionamiento no se adapta bien a la digitalización y a los nuevos modelos de negocio.
Desde el punto de vista del Estado, este régimen también supone un problema de recaudación. Hacienda podría estar perdiendo ingresos fiscales al no existir una relación directa entre los impuestos pagados y la facturación real de los autónomos en módulos.
¿Por qué el Estado español quiere suprimir los módulos?
El Gobierno español lleva años planteando la eliminación progresiva del régimen de módulos. Aunque todavía sigue vigente para algunos sectores, cada vez más actividades han sido excluidas, con el objetivo de migrar a un sistema más justo y basado en la facturación real de cada negocio.
Asimismo, organismos internacionales y normativas europeas han recomendado la eliminación del sistema de módulos, ya que consideran que distorsiona la competencia y favorece la economía sumergida.
Aunque el sistema de módulos sigue existiendo, cada vez es más restrictivo y todo apunta a que, en los próximos años, desaparecerá o quedará reservado únicamente para casos muy específicos.
